Con el tiempo, el exceso de glucosa en la sangre puede causar problemas serios. Puede provocar lesiones en los ojos, los riñones y los nervios. La diabetes también puede causar enfermedades cardíacas, derrames cerebrales e incluso la necesidad de amputar un miembro. Las mujeres embarazadas también pueden desarrollar diabetes, la llamada diabetes gestacional.
Un análisis de sangre puede mostrar si tiene diabetes. El ejercicio, el control de peso y respetar el plan de comidas puede ayudar a controlar la diabetes. También debe controlar el nivel de glucosa y, si tiene receta médica, tomar medicamentos.
Causas
La diabetes afecta al 6% de la población. Las posibilidades de contraerla aumentan a medida que una persona se hace mayor, de modo que por encima de los setenta años la padece alrededor del 15% de las personas. Es esencial educar a los pacientes para que controlen su diabetes de forma adecuada, ya que puede acarrear otras enfermedades tanto o más importantes que la propia diabetes: enfermedades cardiovasculares, neurológicas, retinopatía (afección ocular que puede conducir a la ceguera) o nefropatía (enfermedad del riñón). El momento de aparición de la enfermedad, así como las causas y síntomas que presentan los pacientes, dependen del tipo de diabetes de que se trate.
Tratamiento
El tratamiento para este tipo de diabetes varía. Puede implicar una o varias de las siguientes medidas:
Es necesario consultar al médico para ver cuál es el la mejor opción para atender tus necesidades.
Insulina:
Hormona que ayuda al organismo a utilizar la glucosa (azúcar) para obtener energía. Las células beta del páncreas son las responsables de producir la insulina. Cuando el cuerpo humano es incapaz de producir suficiente insulina, es necesario inyectarle insulina obtenida de otras fuentes, ya sea bovina, porcina o humana.
Algunos tipos de insulina son las siguientes:
Insulina de acción rápida, comienza a trabajar a partir de 5 minutos de ser inyectado, y continua trabajando por un periodo de 2 hasta 4 horas. Insulina de acción intermedia, comienza a trabaja a partir de 2 a 4 horas después de haber sido inyectado, y sigue siendo efectivo por un periodo de 12 hasta 18 horas. Insulina de acción prolongada, comienza a trabajar a partir de 6 a 10 horas después de haber sido inyectado, y sigue siendo efectivo por un periodo de 20 a 24 horas. Insulina bifásica, es una mezcla de insulina intermedia y de insulina rápida. Consulta al médico para ver cuál de éstas es la mejor para ti.
Transplantes:
Hay veces que la diabetes llega a afectar los riñones o el páncreas al grado que éstos dejan de funcionar. Cuando esto sucede se pueden considerar tratamientos como la diálisis. Sin embargo, a veces es necesario un transplante de estos órganos.
- Dietas
- Insulina
- Transplantes
Es necesario consultar al médico para ver cuál es el la mejor opción para atender tus necesidades.
Insulina:
Hormona que ayuda al organismo a utilizar la glucosa (azúcar) para obtener energía. Las células beta del páncreas son las responsables de producir la insulina. Cuando el cuerpo humano es incapaz de producir suficiente insulina, es necesario inyectarle insulina obtenida de otras fuentes, ya sea bovina, porcina o humana.
Algunos tipos de insulina son las siguientes:
Insulina de acción rápida, comienza a trabajar a partir de 5 minutos de ser inyectado, y continua trabajando por un periodo de 2 hasta 4 horas. Insulina de acción intermedia, comienza a trabaja a partir de 2 a 4 horas después de haber sido inyectado, y sigue siendo efectivo por un periodo de 12 hasta 18 horas. Insulina de acción prolongada, comienza a trabajar a partir de 6 a 10 horas después de haber sido inyectado, y sigue siendo efectivo por un periodo de 20 a 24 horas. Insulina bifásica, es una mezcla de insulina intermedia y de insulina rápida. Consulta al médico para ver cuál de éstas es la mejor para ti.
Transplantes:
Hay veces que la diabetes llega a afectar los riñones o el páncreas al grado que éstos dejan de funcionar. Cuando esto sucede se pueden considerar tratamientos como la diálisis. Sin embargo, a veces es necesario un transplante de estos órganos.
Prevencion
Para la diabetes tipo 1 no existe ningún método eficaz por el momento. En cambio, está comprobado que la de tipo 2, que es la que aparece con más frecuencia, al estar relacionada con la obesidad se puede tratar de evitar en gran medida adoptando unos hábitos de vida saludables:
- Evitando el sobrepeso y la obesidad.
- Realizando ejercicio físico de forma regular. - Abandonando el tabaco y las bebidas alcohólicas.
- Siguiendo una dieta alimentaria sana. Para prevenir las hipoglucemias, los diabéticos deben tener en cuenta lo siguiente:
- Ajustar las dosis de los medicamentos a sus necesidades reales.
- Mantener un horario de comidas regular en la medida de lo posible;
- Tomar cantidades moderadas de hidratos de carbono antes de realizar ejercicios extraordinarios;
- Llevar siempre azúcar consigo. En cuanto aparezcan los primeros signos de hipoglucemia, hay que tomar azúcar (2 o 3 terrones), galletas (de 3 a 5 unidades) o beber un vaso (150 ml) de alguna bebida que contenga hidratos de carbono de absorción rápida (zumos de frutas, cola, etc.). Los síntomas suelen pasar en 5 o 10 minutos. Si la hipoglucemia es grave o la persona pierde la conciencia, es necesario inyectarle una ampolla de glucagón por vía subcutánea (igual que la insulina) o intramuscular (en la nalga). El glucagón moviliza las reservas de glucosa del organismo y hace efecto en unos 10 minutos. Si no hay recuperación, el afectado debe recibir asistencia médica inmediata.
0 comentarios:
Publicar un comentario